Compostaje

El compostaje es un proceso biológico aerobio (con presencia de oxígeno) que, bajo condiciones de ventilación, humedad y temperatura controladas, transforma los residuos orgánicos degradables en un material estable e higienizado llamado compost, que se puede utilizar como enmienda orgánica.

El proceso de compostaje imita la transformación de la materia orgánica en la naturaleza, y permite homogenizar los materiales, reducir su masa y el volumen e higienizarlos. Este tratamiento favorece el retorno de la materia orgánica al suelo y su reinserción en los ciclos naturales.

El proceso de descomposición se basa en la actividad de microorganismos como los hongos y las bacterias y su duración puede oscilar, dependiendo de distintos factores (sistema, tecnología, disponibilidad de espacio, etc.), entre 10 y 16 semanas.

La velocidad de la biodegradación depende de la temperatura (50-70°C son típicos de un proceso de compostaje industrial), la humedad (se requiere agua para el proceso) y el número y los tipos de microbios. En las instalaciones de compostaje industrial, todos estos requisitos se otorgan y los productos plásticos compostables certificados se convierten en CO2, agua y biomasa.

Más información en los siguientes enlaces: Compostaje European Bioplastics

El compost enmienda orgánica aporta muchos importantes beneficios al suelo:

  • Aportación de materia orgánica, biofertilidad, mejora de la estructura y la retención hídrica, etc.
  • Retención de carbono en el suelo, por tanto, incrementa el potencial del suelo como sumidero de carbono. La incorporación continuada de materia orgánica en el suelo, comporta que el nivel de carbono orgánico se estabilice en niveles superiores en relación al existente al inicio de las aplicaciones.
  • Disminución de la erosión y degradación del suelo, contribución a evitar o revertir los procesos de desertificación.
  • Sustitución de fertilizantes químicos y/u otras enmiendas orgánicas que conlleva beneficios ambientales por ahorro energético y de emisiones, así como económicos.

Las características físicas, químicas y biológicas del compost permiten que este material se pueda utilizar en distintos ámbitos y actividades obteniendo resultados muy positivos:

  • Como abono natural en agricultura extensiva y ecológica (cereales, huerta, fruticultura, vid, etc.).
  • Como fertilizante en labores de jardinería, tanto pública como privada, y en la formulación de sustratos.
  • Como elemento para restaurar suelos degradados en proyectos de obra pública (clausura de vertederos, regeneración de taludes, etc.) o en la restauración de actividades extractivas.

Los usos del compost quedan regulados por el Real Decreto 999/2017, de 24 de noviembre, por el que se modifica el Real Decreto 506/2013, de 28 de junio, sobre productos fertilizantes que tiene por objeto establecer la normativa básica en materia de productos fertilizantes y los procedimientos necesarios de coordinación con las comunidades autónomas.

Desde ASOBIOCOM se promueve la compostabilidad como una vía complementaria a las existentes. La materia orgánica es una parte muy importante de los residuos. Su tratamiento aeróbico, puede permitir obtener un compost de calidad que puede ser utilizado como abono en la agricultura.

En este sentido, los BioCom son una ayuda extraordinaria para potenciar esta vía, ya que sin ningún tipo de separación ni tratamiento previo pueden ir junto con la orgánica a una planta de compostaje industrial para ser transformados en compost.

Para ser adecuados para el compostaje, los productos y materiales deben cumplir con los estrictos criterios de la norma europea EN 13432 sobre compostabilidad industrial. Tras la certificación, estos productos y materiales pueden publicitarse y etiquetarse como compostables. Para ver los logos que identifican la compostabilidad según esta norma haz click aquí

 

Web de la ARC para ilustrar el compostaje.